sábado, 26 de junio de 2010

184. Pregunta - Quinta propuesta

Con respecto al interrogante planteado en el párrafo 178, les presento ahora el texto elaborado por Ángel Lago Villar que nos escribe desde España.
También recomiendo a todos leer su muy interesante blog titulado La hora del té.
Ángel, muchas gracias por tu colaboración.


El problema radica en el ANSIA o, si lo prefieres, usamos el término eclesiástico: LA AVARICIA.

No nos conformamos con lo que tenemos siempre queremos más y más...

No bastaba con ser habitantes de la Tierra. No, teníamos que dividirla, darles nombres y decir bien alto: ¡¡Es mía!!

Pero, el Ansia era mayor y queríamos conquistar más pueblos, y tener más y más...

Y no nos parecía bastante, y nos apoderamos de nuestro prójimo. El esclavo era nuestra propiedad.

Despues de esto ya no había límites. Todo lo que queríamos o deseábamos podría ser nuestro. ¡¡Teníamos un gran poder!!

Ahora nuestros niños, que son un reflejo de lo que les mostramos, no quieren un balón de 10 €, quieren el balón del Mundial de 120 €. ¡¡Aunque los dos sean redondos!!
Y quieren la última consola, y el mejor juego... y los mejores pantalones...

Esto lo hemos creado nosotros. Si tu hijo dice que quiere ser barrendero, te echas las manos a la cabeza: "¡Me quieres matar a disgustos!"
Queremos que sea cirujano, aunque sea un desgraciado que hubiera sido un feliz barrendero.

Y más y más...

Y, como la Tierra ya se está quedando pequeña ahora queremos invadir la Luna, luego Marte...

Más y más.

¿El futuro?
Me gustaria decir que si mañana nos levantáramos por arte de magia, todos desnudos, sin casas, sin coches, sin empresas, sin nada más que solo la tierra. Me gustaría decir, digo, que todos seríamos mejores... Pero, siempre habría alguien que quisiera la tierra donde tu estás sentado.

2 comentarios:

Roberto dijo...

Ángel, la lectura de tu propuesta inmediatamente me ha recordado lo que dice el personaje "María" en mi "Novela del tiempo", cerca del final del capítulo 4 (que es la entrada 143 de este blog):

"Debo confesarles que yo también he reflexionado mucho sobre estos temas y creo haber llegado a la conclusión de que el mayor problema que tenemos sobre este planeta es, permítaseme decirlo con dureza, la falta de razonabilidad de los objetivos de las personas sobre ellas mismas, sobre los demás y sobre el extraordinario universo que nos rodea."

Te pido disculpas por la autoreferencia pero me vino este párrafo instantáneamente a la mente luego de leer el tuyo.

Un gran abrazo desde Buenos Aires.

angel lago villar dijo...

Querido Roberto:

Sin disculpas, porque suscribo las palabras de "María".

Nos estamos desviando de nuestro primario objetivo que era simplemente "vivir".

Un abrazo Roberto.